Con las chicas

Tess había arreglado para salir con Rose para agradecerle por todo lo que había hecho por ella en el último tiempo. A demás de eso, había arreglado también para que Tarja se les uniera porque le parecía que podían llegar a llevarse bien esas dos. Tarja le parecía una persona que seriamente necesitaba más amigos y divertirse, y Jenna era demasiado histriónica para congeniar con la finlandesa.

Se metió en el bar del caldero chorreante y esperó sentada un rato a ver si venían sus amigas. Mientras tanto, se había pedido una tacita de alelí y estaba leyendo un pequeño librito que había sacado de su bolso negro. Tenía puesta una pollera marrón de lana hasta el piso y un sweater negro de lana bastante esponjosa. Arriba de todo, su túnica verde oscuro completaba el atuendo pero no llevaba túnica de viaje porque no parecía que fuera a nevar.

Rose había estado extremadamente ocupada entre sus prácticas en San Mungo y los clientes que la llamaban de urgencia a sus casas de manera particular. En medio de todo eso, no había logrado hacerle demasiado lugar a Tessa en su vida, ni siquiera cuando sabía que ésta andaba con problemas graves y necesitaba su ayuda. Tal vez por eso había sugerido que se juntaran para almorzar e ir de compras la tarde del sábado, como para compensar y darle a entender que no era falta de aprecio sino falta de tiempo. También pensaba preguntar cómo andaba con su problema y si todavía necesitaba su ayuda o ya se había ocupado sola.

Con todo eso en la cabeza, Rose entró en el caldero chorreante y encontró a Tessa de inmediato. Se acercó a ella con una sonrisa enorme en el rostro, contenta de verla y de poder tomarse un merecido descanso. Tenía puesta una pollera de jean acampanada y larga hasta el piso que hubiera pasado por una prenda magica clásica de haber sido de otra tela. Arriba, una blusa roja con escote en V y un sweater rojo con un tejido bastante abierto que no parecía demasiado abrigado se veían por debajo del tapado de cuero marrón oscuro que usaba en lugar de túnica.

"Tessy-pooh!" Se sentó en la mesa frente a ella y le sonrió ampliamente. "Llegas temprano." Comentó sorprendida. No recordaba cuándo había sido la última vez que Tess había estado temprano a ningún lado. Siempre la tenía que esperar por al menos una hora y se preocupó un poco.

Al escuchar la voz conocida de Rose, Tess sonrió y levantó la mirada de su lectura, la cual dejó inmediatamente de lado en su cartera. "Rosie-Posie!" Le devolvió el saludo animada. "Sí, por una vez en la vida, Lo sé." Se le adelantó con una sonrisa de mea-culpa.

Tenía varias cosas que decirle antes de que Tarja llegara. La había citado media hora después a propósito, pero no estaba segura de que les fuera a alcanzar el tiempo ni de por dónde empezar.

"Hay una colega que me gustaría presentarte." Le dedicó una mirada de disculpa anticipada. "Le dije que viniera un ratito más tarde. Espero que no te importe." La miró con cierta culpa. Hacía mucho que no tenían tiempo a solas y pensó que tal vez Rose no querría compartirla. "Me pareció que te caería bien." Explicó intentando compensar.

Rio brevemente. "Me alegra que por lo menos lo tengas asumido." Bromeó mirándola con más detenimiento de arriba abajo. Todavía estaba encinta. La conocía lo suficientemente bien como para saber que su amiga era un palo. No tenía esas subidas y bajadas de peso normales en las demás mujeres. Bendito su envidiable metabolismo. Se preguntó qué habría pasado, pero antes de que pudiera sacar el tema a colación, Tess le dijo de su colega y se quedó callada. No le molestaba que le presentaran gente, pero se mostró un poquito irritada porque tenía cosas importantes de las que quería hablar con Tess y si había más gente no iba a sentirse cómoda.

"Para nada. Sabes que me gusta conocer gente nueva." Le dijo con una sonrisa leve. "Aprovechemos el rato que tenemos, entonces." Propuso con una mirada que anticipaba que iría al grano. "¿Por qué sigues embarazada?"

Tess también rió con complicidad. Eran pocas y se conocían bien. Por eso mismo había sentido que Rose no estaba del todo feliz con la idea y se había disculpado tanto.

Asintió no del todo convencida, pero decidiendo no perder más tiempo dándole vueltas al asunto de que si quería o no conocer gente y si le molestaba. De todas formas ya estaba hecho así que no tenía sentido.

Conocía demasiado bien a Rose para que le llamara la atención que fuera al grano casi sin tacto, pero igual le chocó un poco que le dijera algo así tan directamente. Su cara de no demasiada alegría lo demostró un poco. "Es un poco largo. No sé si llego a contártelo todo." Se excusó intentando ver cómo resumirlo.

"La otra noche, después de que estuve en tu casa, me crucé con Jax en el pasillo y estuvimos hablando un rato. Me hizo algunas preguntas sobre Will y si nos habíamos cuidado." Explicó. "Yo le conté que los dos nos habíamos cuidado y no me quiso creer, se puso en irónico, pero entonces dijo algo que me puso a pensar." Hizo una pausa, aunque venía hablando más rápido de lo habitual para poder llegar a contarle todo. "Como no tengo mucha vida social... mucho menos sexual, no llevo demasiado control de mis períodos, y me acordé que un mes y pico antes de que empezara a salir con Will, Jax y yo nos acostamos. Estábamos hablando, discutiendo la posibilidad de volver juntos y pasó. Al final decidimos esperar y como somos incompatibles, ni me acordé de eso... hasta la otra noche." Explicó. Tomó un sorbo de su té que ya estaba helado.

"Le conté eso a Jax y se calmó bastante, pero no teníamos forma de confirmarlo, así que le sugerí ir a la guardia, ver si conseguíamos que alguien nos hiciera un estudio... en fin, estábamos de camino por el pasillo cuando nos cruzamos con Matt y Jenna. Yo me lo quería comer crudo, pero para evitar problemas en un lugar público, Jax accedió a cuidar a Revan, el hijo de Matt, hasta que ellos volvieran del teatro." Explicó. "Nos quedamos toda la noche cuidando del niño y yo estaba muerta así que me quedé dormida con Rev en la cama de Jax." Comentó. "Cuando me desperté a la madrugada, él me estaba abrazando, pero no lo quise despertar."

"Al otro día, me dice que no me había querido despertar, que se había tirado a leer al lado mío y se había quedado dormido y que..." Tess venía bastante rápido hasta ese punto, pero ahí se trabó un poco, porque le agarró algo en la garganta. "...que lo habían despertado las patadas del bebé en la espalda..." Dijo haciendo un esfuerzo por hablar sin que le temblara la voz. Lo consiguió solo a medias y de todas formas, la cara la vendió bastante. Imaginó que, como médico, Rose sabía mejor que nadie que de haber sido de Will, el feto habría sido demasiado pequeño como para que Jax sintiera nada a través de ella.

Rose escuchó la narración de Tessa con interés. Hizo un mohín de irritación al oír que casualmente se había cruzado con Jax en el pasillo, porque dudaba que esa parte de la historia estuviera siendo contada de manera fiel, pero no iba a interrumpirla cuando tenían poco tiempo.

Hacia la mitad, Tom se acercó a preguntar qué quería tomar y le explicó que estaban esperando a alguien más y que ordenarían cuando esa persona llegara.

Levantó las cejas cuando oyó que Jax se había quedado dormido abrazándolo y luego escuchó el resto de la historia con expresión seria. Asintió al llegar al final, porque si bien no se especializaba en neonatología, era medimaga y tenía suficientes conocimientos sobre el tema como para entender las implicancias. Sin embargo, no se mostró demasiado entusiasmada ni nada. Se quedó tranquila como venía, aunque le sonrió con calidez. "Y eso terminó con las discusiones, asumo." Dijo con cierta complicidad. Como sabía que ellos eran incompatibles, no se hacía demasiado problema pensando en el crío. Aunque algo le vino a la mente en ese momento al respecto. Se enderezó en la silla con el rostro ensombrecido.

"How far along are you? Seems too far along to abort..." Era su manera de tratar el tema con tacto, porque preguntarle cómo se estaba preparando para un stillbirth era la otra opción.

Tess sabía que estaba ajustando un poquito la verdad en esa parte, pero confió en que el poco tiempo que tenían para hablar y el hecho de que el resto de la historia era importante, bastara como para que Rose pasara el asunto por alto y no volviera sobre detalles insignificantes más tarde. De momento, su predicción parecía estarse dando tal cual, así que se relajó confiada.

Se sintió un poco decepcionada de que no se tomara la noticia con más alegría. Ella estaba demasiado cegada a la realidad por la esperanza y demás como para poder pensar objetivamente como Rose lo estaba haciendo. Estaba a punto de abrir los ojos a la verdad. "Sí. Totalmente." Concordó con una expresión que daba a entender que estaba levemente frustrada, que esperaba más de ella tal vez o que estaba un poquito dolida de que no estuviera feliz por ella. Se negó a rendirse, así que estaba dispuesta a explicarle la situación más al detalle cuando ella le hizo esas preguntas que la indignaron un poco.

"I don't know for sure." Le dijo sinceramente, tal vez más seria y menos simpática de lo que era habitualmente con Rose. "Somewhere among the fourth month." Dijo según la cuenta mental que habían hecho con Jax la otra noche. "Y todavía no tuve ninguna amenaza de aborto." Le dijo si bien no exultante, visiblemente contenta. "Creo que es por mucho lo más lejos que llegué." Había un dejo de orgullo en su voz y un brillito en sus ojos que antes nadie le hubiera creído, porque ella siempre había detestado la idea de tener niños. Al menos hasta que el ver a Revan le había removido todo el instinto maternal... y aparentemente no a ella sola.

"Jax quiere que intentemos llegar a término." Le dijo tan nerviosa como entusiasmada, como adolescente que habla de que el chico que le gusta la miró en clase. "No es lo que teníamos planeado, pero como no tenemos muchas otras probabilidades..." Le dijo con una mueca de preocupación. "Tengo turno para el lunes." Explicó.

Después de tantos años, Rose sabía a la perfección cuándo su amiga estaba mintiendo y cuando no. Además, la conocía lo suficiente como para saber qué haría y qué no en cada situación, pero como Tessa sospechaba, el resto de la historia era demasiado importante como para focalizarse en ese tipo de detalles.

Escuchó con atención y con un interés que en parte era un poco clínico, pero sobre todo porque quería a su amiga y se preocupaba por ella y quería cuidar su salud... y para eso lo mejor que sabía, como médica era justamente... ponerse en médica. Y como doctora parecía preocupada. "Hmm... come here." Le pidió con seriedad, acercándose a ella con silla y todo, estirándose hacia adelante. Miró a su amiga a los ojos como pidiendo permiso y después de eso deslizó las manos por debajo de la ropa de ella para apoyarlas en su estómago. Cerró los ojos y se concentró en el hechizo durante unos largos segundos. ((Dif 7 porque no es algo en lo que se especialice))

Cuando terminó el examen, la miró y escuchó las noticias con visible sorpresa. "¿Con un especialista? ¿Con quién?" Preguntó para ver si lo conocía, así podía decirle si era un buen profesional o tal vez recomendarle otro.

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'10 Caras' :

Había logrado hacer el estudio de manera satisfactoria, así que se había hecho una idea bastante clara de cómo venía la cosa, aunque no estaba segura de querer contarle los detalles a Tessa para no ilusionarla, porque no le tenía demasiada fe considerando los dos tipos de incompatibilidades que ella y Jax tenían.

Por un momento, Tess se sorprendió de que se le acercara y le dijera eso, pero después entendió lo que quería hacer y asintió cuando le sostuvo la mirada. Se levantó el sweater y remera de manera discreta a pesar de que no había demasiada gente en la posada en ese momento y miró con curiosidad lo que Rose hacía. Contuvo la respiración de manera inconsciente, de puro nerviosa. Habían querido tanto una ecografía que no podía creer que finalmente se iban a sacar la duda. Aunque no tuviera manera de ver lo que Rose estaba mirando en su cabeza, porque no daba proyectarlo ahí como uno haría en un hospital, el que al menos le fueran a informar si estaba todo bien y si sus sospechas eran correctas la hizo sentirse aliviada. Al acabar Rose el examen, Tess la miró expectante, tan nerviosa y esperanzada como solo una mujer en su situación podía estarlo.

A pesar de ésto, hubiera querido que su amiga se mostrara un poco menos clínica y bastante más cálida, que se alegrara por ella y tuviera una reacción más normal. Entendía que tenía deformación profesional y que se preocupaba por ella, pero igual su corazón necesitaba contención que no estaba teniendo.

"Doctor Black." Informó aunque a ella no le decía nada en particular, porque no conocía muchos otros doctores. "¿Lo conoces?" Preguntó por curiosidad

((Tiro para ver si son dos. Habíamos hablado de algo así con Jax en un momento.))

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'SÍ/NO' :

"Estás a la mitad de la 19va semana... eso es casi cinco meses." Aclaró para que no tuviera que hacer la cuenta y evitaran confusiones. "Supongo que Jax pudo sentirlo porque eres un palito. A las mujeres más redondas les toma bastante más tiempo que alguien más pueda sentir los movimientos del feto." Comentó pensando que la estaba halagando por ser flaca, aunque seguramente casi nadie haría esa lectura de su frase.

"Es bastante más lejos que la última vez." Concedió por eso que decía ella de intentar llevarlo a término. "Podrían tener una chance..." le dijo con seriedad, mirándola a los ojos y buscando las manos de su amiga para tomarlas entre las suyas. Estaba pensando en si decirle que tenía otro motivo para pensar en que las probabilidades eran buenas para ellos, pero no estaba segura de si era el momento para ello. Tampoco quería que se hiciera muchas expectativas porque conocía lo sensible que era Tessa y no quería verla destrozada.

"Pero deben tener en cuenta que incluso si las cosas parecen marchar bien, todavía tienen un alto riesgo de que el bebé nazca muerto por envenenamiento sanguíneo." Le dijo con la mirada apenada de quien odia dar malas noticias, pero cree que es su deber hacerlo. "Yo sé que no es lo que quieres oír en este momento, Tess." Se adelantó con suavidad a las protestas que pudieran venir, porque sabía en qué situaciones Tessa solía protestar y quería evitar peleas. "Pero nada más quiero que estés mentalmente preparada para lo que sea. Que pase lo que pase puedas estar bien." Le explicó con una mirada suplicante. le dio un apretoncito en las manos antes de soltarla y volver a sentarse en la mesa de manera normal.

"Ya para lo técnico están consultando a un especialista que va a hacer todo lo posible por sacar el embarazo adelante." Le dijo ahora más con un tono de amiga que de doctora, porque no quería seguirse arriesgando a que Tess se enojara, algo que se le ocurrió demasiado tarde en realidad.

"También hay algo más... una buena noticia." Le dijo intentando hacer algo para compensarle las preocupaciones que seguramente le había generado con toda su charla. "Pero no sé si querrán enterarse los dos juntos." Explicó el por qué estaba guardando silencio. ((Tendrías que tirar por el sexo y para ver si son fraternos o monocigóticos))

Tess asintió. No le sorprendía escuchar eso que coincidía más o menos con su cálculo, aunque para ser honesta, había pensado que estaba más cerca de la 16va semana que de la 20va ((no es crítica. Estoy de acuerdo. Tiene más sentido)).

Exhaló por la nariz como si fuera una risita, con una sonrisa en el rostro, porque conocía la manera tan rara que tenía Rose de decir cumplidos. De no conocerla, no hubiera ni podido reconocerlo como un halago. "I'm a freak of nature. I know." Bromeó un poco, aunque hubiera deseado que su amiga dijera bebé en lugar de feto y dejara de distanciarse tanto de todo como si no fuera su amiga de toda la vida, desde el momento en que se habían sentado juntas en el expresso de hogwarts.

La miró con cara de pobre perrito apaleado cuando le dijo que tenía más chances esa vez. "Ojalá..." gimoteó. "Desde que Matt adoptó al sobrino de Jax que ando con una baby fever tremenda. ¡Es tan divino! y el estarlo cuidando la otra noche, no ayuda." Explicó mortificada porque no era como las demás futuras madres que tenían todo esperanza y pedos de color rosa. Ella sabía que tenían pocas oportunidades de que eso funcionara con la incompatibilidad ABO y la Rhesus que ella y Jax tenían.

Apretó las manos de Rose con fuerza y la miró con una cara de pobre perro aún más acuciada, como rogándole que dejara de contar esa historia de terror o no iba a poder dormir por la noche. "Lo sé..." murmuró nerviosa. Se sorprendió de que Rose le dijera eso, pero se sintió agradecida. "Lo sé, cariño. Y te agradezco. Sé que te preocupas por mí." Le dijo dedicándole una mirada cariñosa pero no exenta de tristeza y preocupación.

Asintió apretando los labios para pelear contra las lágrimas que se le agolpaban en los ojos. "I'm sorry." Se disculpó avergonzada mientras se pasaba una mano por los ojos rápidamente.

La mirada se le iluminó un poco cuando escuchó lo de 'buena noticia' y la miró inquisitiva y algo esperanzada... tal vez demasiado esperanzada para su propio bien. "¡Oh!" Exclamó sorprendida, con una sonrisa ahora más sincera en el rostro. "¿Ya sabes el sexo?" Preguntó para saber si se trataba de eso más que para que le dijera.

((El primer dado es para ver si son fraternos. El segundo y el tercero son para ver si tienen algo entre las piernas y si llegan a ser idénticos el tercer dado se anula.))

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'SÍ/NO' :

((OK, entonces son varones idénticos. OMG es justo lo que Jax y yo habíamos soñado. Vamos a ver si llegado el momento sobreviven... pero bueno, los dados de momento están de nuestro lado, parece.))

((Qué orto!! ¬¬ Cuando yo quiero que algo pase de alguna forma y tiro los dados seguro saco 1 o todo lo contrario.))

"You most definitely are." Coincidió con ella, que acababa de citar lo que Rose tantas veces le había dicho a lo largo de los años: que debía ser un monstruito de la naturaleza para tener tan buen metabolismo.

Rió nasalmente y la miró de manera elocuente. "¡Quien te ha visto y quien te ve!" Exclamó divertida. Su amiga había sido la más acérrima detractora de los bebés desde que la conocía.

Rose había escuchado algo muy a las apuradas sobre Matt adoptando un chico, pero ni había tenido tiempo de sentarse a leer el artículo de la revista, ni de preguntarle a Tess más detalles con todos los dramas que últimamente habían monopolizado sus encuentros. Rose siempre se interesaba por las cosas que ella contaba de Matt, aunque fingía indiferencia. No es que lo quisiera, pero siempre le picaba la curiosidad de saber qué era de la vida del rubio porque habían salido un par de semanas en la secundaria y a las chicas les queda siempre esa cosa de querer saber en qué andan sus exes, aunque más no sea para sentirse bien con ellas mismas. Claro que podía leer las revistas y los diarios, pero sabía que a menudo la prensa exageraba o directamente inventaba cuando Tess como mejor amiga seguramente conocía la información verdadera. Pero ese no era el momento de preguntar. Ya volvería sobre ello más tarde si tenía oportunidad y a la otra profesora le gustaba el chusmerío como a la mayoría de las mujeres.

Asintió mirándola agradecida de que pudiera interpretar las cosas correctamente. "Obvio que me preocupo por ti, Tessy. Eres mi mejor amiga hace..." se tomó un momento para pensarlo. "¿¡Veinte años ya!?" Exclamó cuando le cayó la ficha. "¿En qué momento empezó a volar tanto el tiempo?" Le preguntó en broma, como para distraerla a temas más livianos y a parte porque no entendía cómo pasaba tan rápido el tiempo. Parecía ayer que estaban en la secundaria.

"Hormonas." Resumió por ella, para salvarle la vergüenza, porque conocía lo suficiente a su amiga para saber que no necesitaba hormonas para llorar por cualquier tontera. Ese momento le pareció bueno para traer a colación lo de la buena noticia y así lo hizo.

Se sorprendió de escuchar lo del sexo, porque ella estaba pensando en la otra cosa. "Ah... sí. Pero no se trata de eso." Dijo con una sonrisa misteriosa, para generarle un poco de expectativa. "¿Quieres saber o prefieres esperar?" Preguntó ahora sí mostrándose un poquito entusiasmada. La idea de poder dar noticias interesantes siempre le agradaba aunque con su rama de trabajo no tenía demasiadas oportunidades de hacerlo

((A mi me pasa lo mismo. Esto fue más traste que cabeza!))

Soltó una risita. "Like you don't look just like a model." Le dijo torciendo el gesto. "A hardcore biker model." Se corrigió con otra risita porque el concepto tradicional no le encajaba del todo. Por el comentario sobre su cambio de actitud, se hizo abusivamente la idiota para no sentirse avergonzada.

Tess venía más o menos triste o preocupada hasta que escuchó eso y abrió mucho los ojos, impresionada. "¿¡Veinte años!?" Exclamó ella también y se puso a hacer la cuenta. "Miércoles... veinte años..." Concedió cuando terminó de calcular. "No tengo idea." Le dijo todavía impresionada. "¡Pero necesito hacer que pare!" Bromeó con una risa.

Le lanzó una mirada agradecida de que le inventara una excusa. Ella también sabía que era llorona todo el año, independientemente del clima o las hormonas.

Levantó las cejas y la miró con una sonrisa de complicidad y curiosidad. "Ah ¿No?" Se sintió tentada a preguntar, pero no pudo decidirse. Se moría de curiosidad pero no quería dejar a Jax afuera. Tal vez diez años antes, pero ahora que parecía de repente tan involucrado... "Casi que tengo miedo de preguntar qué es, entonces." Dijo nerviosa pero en el buen sentido. Al menos se había calmado un poco en cuanto a sus preocupaciones.

Suspiró. "Ay... no lo sé..." Se la notaba dividida. "No es que no quiera saber, pero esta vez Jax parece tan involucrado... incluso más que yo... que me sentiría mal de dejarlo afuera." Explicó.

((Seh claro... eso dicen todas.))

Sonrió complacida por el halago. "Not that I can put it to any use anyway. I'm too busy for a boyfriend and The Club still won't take in women." Comentó con la boca torcida en un gesto reprobatorio.

Rió entre dientes. "¡Urgente!" Añadió por las dudas. "¡Tengo miedo de que si me quedo dormida me despierte de ochenta!" Bromeó.

Sonrió a su amiga con cariño y complicidad pero no agregó nada más.

Negó con la cabeza, con una expresión misteriosa en su rostro y una sonrisa. Rió por lo de tener miedo. "Ya te dije que es algo bueno." Le aseguró.

Una sonrisa comprensiva le apareció en el rostro. Por un momento se mostró algo triste por empatía pero después se la iluminó el rostro y sonrío. "Te diré lo que haremos." Informó animada antes de ponerse a revolver en su cartera para sacar un lápiz y un trozo de pergamino que apoyó en la mesa. Empezó a garabatear algo ahí a las apuradas. "Lo pondremos en un sobre sellado y lo pueden abrir juntos. ¿Te parece?" Ofreció con una sonrisa orgullosa de su idea.

Cuando terminó de escribir, cerró los ojos y apoyó las manos sobre el dorso del pergamino. Lo que ella había visto en esa especie de ecografía apareció como impreso en la supeficie y se apresuró a doblarlo para que Tess no pudiera verlo. "Shh. Sin espiar." Le advirtió intentando mostrarse seria.

Sacó un sobre de su cartera y metió el papel adentro. Después apareció una barra de lacre con un movimiento de muñeca y lo encendió chasqueando los dedos de la otra mano. Goteó para sellar el sobre y apagó el lacre que desapareció un momento después. Mientras, se sacó el anillo con sus iniciales y marcó el lacre para después entregarle la carta a Tessa. "Here." Dijo contenta.

((Jajajaja xD cualquiera))

Sonrió de manera resignada mientras ladeaba la cabeza y se encogía de hombros. "Men and their toys." Dijo como si eso lo explicara todo. "¿Para qué quieres estar en un club que no respeta a las mujeres?" Le preguntó con curiosidad genuina. Era algo que nunca entendería.

Rió por la broma de Rose y en el medio acotó "¡O noventa!" y siguió riendo.

Volvió a levantar las cejas sorprendida y sonrió intrigada. Era tan impaciente que iba a sufrir toda la semana por eso, pensó.

"¿Qué?" Preguntó esperanzada. La idea de esperar la mataba. Observó intrigada a Rose que escribía y se preguntó qué se traería entre manos. Sonrió enormemente cuando le explicó de qué se trataba. "¡Ay! Eso sería genial. Muchas gracias, Ro." Le dijo sinceramente agradecida. "¿Con fotito también?" Preguntó entusiasmada, aunque sabía que no debía emocionarse demasiado ni mucho menos encariñarse, pero no podía evitarlo. El ver a Revan la tenía a full con la baby fever. Tomó el sobre y lo guardó en un bolsillo interno de su túnica. Era demasiado importante para confiarlo a su cartera, pensó. "Gracias." Le dijo vehementemente.

((O_o Ok... aflojale a los honguitos que hacen mal ;))

Le sostuvo la mirada un momento, con un levísimo fruncimiento en su ceño. "No espero que lo entiendas, Tess, pero me gustan las motos y sé tanto o más que cualquiera de ellos sobre el tema. Y sin embargo no me dejan formar parte de su grupo. Obvio que me molesta, pero si hubiera un montón de gente con la que serías capaz de hablar todo el día de algo que te fascina y hacer actividades que te gustan. ¿No querrías entrar tu también?" Era la explicación más lógica que podía darle. A demás, estaba el tema de que varios de sus exes aún formaban parte del club y que había sido por ellos que se había acercado a las motos... y no había muchos más lugares en que una doctora que trabajaba catorce horas por día pudiera conocer hombres.

Puso cara de qué horror y rió otro poco.

Sonrió con cariño. "Para que no te quedes con la curiosidad." Sonrió de manera cómplice. "Ajá." Hizo con la garganta mientras imprimía las imágenes en el pergamino. "Ya que estamos..."

Adentro del sobre, del lado escrito decía: "Tessa está de 19 semanas y 5 días. Se trata de dos niños. Gemelos idénticos pero cada uno tiene su placenta, así que es más probable que uno sobreviva si le sucede algo al otro. Cariños. Rose."

"De nada." Dijo para dar el asunto por concluído. "¿Así que Matt adoptó un niño? No me lo hacía ese tipo de persona." Admitió sorprendida.

((Vos aflojale a los hongüitos. Yo no dije nada :S))

Asintió aunque no estaba de acuerdo. Entenderlo, lo entendía. "Sí, supongo que sí..." dijo pensativa. No estaba segura de que ella sintiera lo mismo, pero si ella fuera Rose en la misma situación, entonces probablemente sí.

"Ay, Ro. Muchísimas gracias. En serio." Le dijo nuevamente, porque no esperaba que la ayudara. Había pensado en pedirle ayuda pero entre que había invitado a Tarja y que ya le había pedido mucha ayuda últimamente, no quiso abusarse.

Sonrió divertida, con un brillito de acusación en los ojos porque siempre le hacía gracia que dijera que Matt no le importaba pero siguiera preguntando por él periódicamente, a pesar de que se negaba a que ella arreglara para que se encontraran. "Es una larga historia, pero sí... adoptó al sobrino de Jax. Supongo que le pegó el viejazo y se dio cuenta de que en realidad está bastante solo." Comentó terminando el final de su té frío con cara de asco. "Y ya que no consigue la mujer ideal ahora que se le dio que quiere una familia... supongo que llegó a la conclusión de que no necesita una mujer para tener una." Era la versión oficial.

Rose estaba noventa por ciento segura de que Tessa realmente no entendía cómo se sentía, pero prefirió no seguirle dando vueltas al asunto.

"Por nada. En serio. ¡Si no me cuesta nada!" Dijo divertida de que se hiciera tanto problema por una estupidez que para ella habían sido nada más que un par de minutos y dos hechizos. No es que le estaba prestando doscientos galleons ni nada.

Se enserieció de inmediato con cara de 'qué interesante'. De alguien como Matt no se esperaba eso del viejazo. Pensaba que iba a seguir pendejo por siempre. Levantó una ceja al escuchar la parte de la familia. "¿Mr. Playboy? ¿Una familia?" Pausa. "¿Estamos hablando de la misma persona!?" De todas las personas en el mundo que no tenían madera para pardres solteros, Matt encabezaba su lista.

"¡Bueno, pero igual!" Farfarulló incómoda, nerviosa y avergonzada, todo a la vez.

Rió levemente, consciente de lo raro que debía sonar. "Sí, es un asunto complejo, pero supongo que Matt parece un tipo bastante básico a simple vista." Pensó en voz alta. "A todos nos llega el viejazo en algún momento. Si no, mírame a mí ¡queriendo niños!" Dijo como si fuera el colmo de lo ridículo y ambas sabían que lo era. Tessa detestaba por regla a los infantes y a los niños pero el haber sostenido a Revan la había puesto en una baby fever impresionante. No... incluso antes de eso, porque ese encuentro casual con Jax había sido anterior... por más que no se dieran cuenta de su embarazo hasta mucho después.

"Y hablando del tema... tu, para cuándo?" Le preguntó con complicidad acusatoria, sólo por el placer de ponerla incómoda.

"Shush!" La mandó a callar de manera imperativa pero a modo de broma.

Rió por el comentario de ella. "¡Tan cierto!" Concordó.

La miró como si le hubiera preguntado algo totalmente incoherente, como cuándo iba a sacar plumas en los brazos y salir volando. "Me? A family? You must be on drugs!" Decretó con seriedad. "No tengo tiempo ni paciencia para esas cosas. Pensé que tú sobre todas las personas lo sabrías bien." La retó un poco decepcionada de que le saliera con esas cosas. Que a Tessa le hubiera agarrado el tema del reloj biológico no quería decir que ella tenía que ponerse a babear por cualquier mocoso que anduviera por ahí.

Disfrutaba con su hobby de partera, pero porque después podía volver a su casa, con su padre y su hermano y olvidarse del niño al cuidado de la madre de turno.

En ese momento Tarja entró en la taberna. Era la hora a la que la habían citado y ella una persona puntual, así que se dirigió hacia la mesa en que reconoció a Tessa sentada junto a otra mujer que no había visto en su vida. Asumió que debía ser su amiga, esa de la que tanto le había hablado y de la cual dudaba que realmente tuviera ganas de conocerla. 

Mientras se acercaba, envuelta en su acorsetado vestido negro de terciopelo y una gruesa sobretúnica de viaje color bordó, oyó el final de la conversación. Algo sobre Tessa queriendo tener niños. El comentario le hizo sentir un escalofrío bajándole por la espalda, pero se tranquilizó mentalmente recordándose que conocía a Jackson lo suficientemente bien como para saber que detestaba los niños y no tenía ningún interés en convertirse en padre mientras el tremendo complejo que le había dejado el suyo propio como herencia aún tuviera influencia sobre su sobria persona.

Nerviosa, como siempre que iba a conocer a alguien nuevo se acercó y saludó a Tessa con cordialidad pero también con mucha timidez y se sentó en la tercer silla de la mesa esperando a ser presentada, según las costumbres Británicas.

Tessa no vio entrar a Tarja porque estaba de espaldas a la puerta. De lo contrario, le hubiera hecho caras a Rose de que cambiara de tema. Quería mantener el tema de su embarazo en secreto por la mayor cantidad de tiempo posible, en especial tratándose de la ex de Jax. Por más que ahora fueran más cercanas.

Cuando su colega llegó, la saludó con naturalidad y señaló a su amiga con un gesto de la mano. 

—Tarja, esta es la doctora Rose Bramson, mi amiga de toda la secundaria. Rose, esta es Tarja Varanen, mi colega y jefa de la casa de Hufflepuff.

—¿Ordenamos? —Sugirió ahora que las tres se hallaban ahí. La verdad es que se moría de hambre. Le hizo una seña al mozo sin esperar respuesta de ellas. El hombre se les acercó a tomarles el pedido.

Ro se puso de pie cuando Tessa dejó en claro que la recién llegada era su amiga y le tendió la mano en un gesto cordial. "Encantada." Dijo con una sonrisa sincera, brillante. Rose era una persona llena de confianza en si misma y por eso irradiaba energía postitiva y a veces parecía un poco avasalladora.

"Por favor. Muero de hambre." Añadió con una risita.