Comprando libros

En medio de su ajetreada semana, Matt había aprovechado la hora del almuerzo y el hecho de que una de sus reuniones de negocios se había cancelado, para ir a Hogsmeade a comprar unos libros que necesitaba sobre ciertas plantas que estaba considerando utilizar para una poción que estaba investigando.

Vestido con su habitual ropa de trabajo, que era extremadamente formal, caminaba por la calle principal con aspecto apurado. Tenía el ceño fruncido y expresión de quien va perdido en sus propios pensamientos. Tan ensimismado iba que pasó frente a una de las librerías principales y la ignoró por completo como si no existiera.

((Cuelgue total. Sí. Sí. No me mates. Necesito vacaciones urgentes.))

Jen había tenido un brunch de negocios algo antes y acababa de salir de encontrarse con un posible cliente en una de las tabernas del pueblo, puesto que no había grandes restaurantes en el mundo mágico. Aún tenía algo de tiempo antes de seguir trabajando, por lo que decidió dar una vuelta para despejar su cabeza. Había sido una negociación difícil y la había dejado con la cabeza quemada.

Giró la esquina con la intención de ir a mirar ejemplares a alguna de las librerías del pueblo. Estaba a punto de entrar en una de las más conocidas cuando reconoció a Matt pasándola por alto y dudó un segundo. No quería interrumpir, parecer interesada en él o algo así, pero tampoco quería dejar pasar la oportunidad de verlo un rato ahora que tenía más o menos tiempo y que también tenía una excusa. No sabía cuánto más les iba a durar la contabilidad e, incluso con Tessa de por medio, no sabía cómo seguirlo viendo después.

Corrió un poquito y lo alcanzó. "Hi Matt!" Lo saludó animadamente.

((You and me both, love.))

Venía totalmente perdido en sus pensamientos y concentrado en no detenerse a mirar la vidriera de la librería de Jewel ni por un segundo, por lo que no la vio acercare. Estaba actuando su mejor pose de macho superado que no necesita a su sucia ex y lo de apurado era justamente para pasar rápido por esa vidriera sin incidentes. Por eso se sobresaltó levemente cuando oyó que alguien lo llamaba. Le tomó una fracción de segundo darse cuenta de que se trataba de Jenna y no de Jewel, pero fue la fracción de segundo más larga de su vida y le había puesto el corazón a mi por hora del susto.

"Ah, Jenna!" La saludó volteando para dedicarle una sonrisa. Entonces le cayó la ficha y la miró extrañado, olvidándose momentáneamente de Jewel y su librería. "¿Qué haces por aquí a esta hora? ¿No estás trabajando?" Le preguntó sin moderar lo que pensaba. Después de todo, si se juntaban con Tess como amigotes los tres tenía derecho a tratarla con cierta familiaridad, no? No quería decir que le estuviera tirando los perros.

((Entonces huyamos ;))

Soltó una risita por las preguntas de Matt. "¿Ahora tengo que darte explicaciones a ti también?" Rió otro poco. "Esa es nueva. Si sabía que iba a ser así de posesivo no le proponía ningún negocio, Mr Rogers." Bromeó de buen humor. El almuerzo había salido bien y siempre era agradable encontrarse con Matt en cualquier lado. Por más que no confiara en él como hombre, no iba a quejarse del eye-candy que era el rubio.

((A dónde me raptarías?))

Él también rió por las ocurrencias de Jenna. "¿Cómo nueva?" La increpó con fingida indignación. "¿No leíste la letra chica del contrato? ¡Por supuesto que tienes que darme explicaciones!" Bromeó de buena gana. Internamente, se alegraba de que ella hubiera bajado un poco la guardia con él y hubiera decidido ser su amiga. Era divertido poder intercambiar estupideces de ese tipo en lugar de tenerla a ella insultándolo directa e indirectamente todo el tiempo por algo que NO había pasado hacía quince años.

((¿Hoy por hoy? A algún lugar frío. Estoy derretida y no precisamente de amor...))

Por un momento se mostró sorprendida pero después soltó la risa. "¡Y yo que pensé que lo decías en serio!" Admitió divertida, negando con la cabeza lentamente, todavía medio tentada.

"Ven." Dijo tomándolo del brazo en un ataque de familiaridad que no supo de dónde salió pero que tenía que ver con la cena que habían compartido con Tessa un par de días antes y el que la acababa de hacer reír. "Acompáñame a ver libros." Le ordenó mientras lo arrastraba del brazo hacia la librería que acababan de pasar.

((JAJAJA muy bueno. Adhiero.))

Sonrió conforme de haberla hecho reír y luego levantó las cejas sorprendido de que Jenna se le colgara de esa manera. Sin embargo, su sorpresa duró poco. Enseguida puso cara de alarma al ver que lo estaba arrastrando hacia la librería de Jewel. "Eh... no creo que eso sea una buena idea." Protestó intentando resistirse. Como no encontró una manera de hacerlo sin posiblemente lastimarla físicamente, se dejó llevar para la librería con la cara de horror de quien siente que se está yendo a doscientos por hora contra una pared y para colmo de cabeza.

((Dejá de adherir vos que te voy a empezar a llamar ducktape ;))

Como no podía verle la cara de pánico desde su posición, asumió que sería otra de las bromas de Matt, una que no podía entender, así que siguió arrastrándolo a la librería con terquedad. Todavía sonreía parcialmente porque estaba de buen humor por tanto chiste y sus negocios que habían salido bien ese día.

"¿Por qué no sería una buena idea?" Le preguntó con tono desconfiado cuando estaban cruzando la puerta de la librería. Le parecía ridículo que le dijera algo así de la nada. "¡Ahora me vas a decir que eres alérgico a los libros!"

((Juaz!))

Jewel estaba atendiendo su negocio como siempre, detrás del mostrador. Estaba sentada en una banqueta, leyendo un libro sobre cuidado de criaturas mágicas de lo más tranquila cuando escuchó la campanilla de la puerta. Levantó la vista con cara de nada, y al ver quien acababa de entrar del brazo de su ex amiga se le quedaron los ojos como platos.

Podía escuchar parte de la conversación y eso al menos la dejó tranquila de saber que Matt no quería estar ahí, pero si él no estaba ahí para refregarle por la cara que estaba con su amiga, era al revés. Y eso la lastimaba aún más. Asumió que la situación iba a ser incómoda, pero tampoco era el tipo de persona que echara a los clientes, así que se preparó mentalmente. "Buenos días. ¿Qué puedo hacer por ustedes?" Le preguntó incapaz de esconder la irritación de tener que tratar con ellos.

((Por diosss... malísimo!))

Casi resignado, pero igualmente espantado por la idea, Matt cruzó la puerta de la librería con ella. No creyó necesario explicarse cuando al entrar lo primero que vio fue a Jewel al otro lado del mostrador. Después de lo que le había contado a Jenna sobre Jewel la otra noche en que se habían juntado con Tess, asumió que ella misma lo comprendería en los siguientes cuatro o cinco segundos.

"Buen Día, Jay..." Dijo algo nerviosamente. Era bastante extraño que una mujer pusiera incómodo a un tipo como él, que suúestamente se las sabía todas, pero considerando la historia entre ellos y que aún le estaba costando trabajo olvidarse de ella y digerir lo de su compromiso... Tenía sentido.

Ante la pregunta de ella se volvió a Jenna inquisitivamente, para demostrar que él no tenía nada que ver con la idea de estar ahí. "¿Qué venías a buscar?" Preguntó todo lo inocentemente que pudo. No quería que Jewel empezara a devariar como siempre y terminara pensando que era todo parte de un plot ideado por él.

((Jay, tenemos que rescatar lo que jugábamos por mail con Sere y postearlo para que la historia tenga sentido... XD Podrías?))

Efectivamente, Jenna entendió a qué venía todo el mambo con Matt en el momento en que oyó el saludo de su ex amiga y recordó en qué librería estaban. Sabía que había "heredado" el lugar de sus padres adoptivos, pero no se le había ocurrido hacer la conexión de que eso significaba que ella estaba ahora trabajando ahí. Se notaba que era una alta colgada y que no compraba libros seguido salvo por catálogo o sus secretarias.

El rostro de Jenna inmediatamente se desfiguró en sorpresa, incomodidad y vergüenza y se puso color rojo en cuestión de segundos. "Ah..." No atinó a responder ni al saludo de Jewel ni a la pregunta de Matt hasta varios segundos después de lo que hubiera sido normal. Era claro que se había olvidado de dónde estaban pero al menos eso quería decir que no lo había arrastrado ahí a propósito... salvo que fuera obra de su inconsciente.

Juntó su poco coraje y tragó saliva mientras intentaba recomponer su expresión facial. "Eh..." intentó recordar lo que iba a buscar. "Sí. Estaba buscando un libro que me pudiera informar sobre las raíces de Ilotya y sus usos." Dijo de un tirón cuando finalmente logró recomponerse. "Pero no hace falta si no quieres... te juro que no me acordaba que ahora trabajabas aquí." Le dijo sinceramente, con cara de mortificada que pide disculpas.

((Seh, pero dame tiempo. Estoy en cama y tengo mucho laburo pendiente, compras navideñas que hacer y galletas de jengibre que hornear.))

En un principio, la paranoia de Jay había hecho que pensara que tal vez Matt estuviera buscando refregarle por la cara que estaba saliendo con otra, más precisamente, con su ex amiga. Luego, había pensado que la situación era al revés, que era ella quien quería refregarle por la cara que ahora salía con su ex, pero entre el pedacito de conversación que había escuchado mientras ellos entraban y la cara de ambos y sus reacciones, se sintió inclinada a creer que lo que Jenna decía era cierto.

Sin embargo, no pudo cambiar la mala cara que tenía, porque era una situación incómoda y no eran precisamente sus dos personas preferidas en el universo. "Ya están aquí. No veo por qué no atenderlos cuando todos somos lo suficientemente adultos para tener una relación profesional." Dijo saliendo de detrás del mostrador para ir a buscar entre las estanterías un libro que pudiera servirle a Jenna.

((Jaja qué nenita. Estás a full. Dejá que lo hago yo. Mejorate pronto.))

Matt, que se había puesto bastante serio y contrito, asintió. "Sí. No veo por qué no..." Repitió aunque su cara de incomodidad daba a entender que hubiera preferido no tener que tener ninguna relación, ni profesional ni de otro tipo con alguien con quien compartía tanta historia.

Ya que Jenna lo había arrastrado ahí, dejó que ella se las arreglara sola. "¿Cómo está Lori? ¿Puedo saludarla?" Preguntó refiriéndose a la hija que compartían.

((Ah la mierda que ha habido mails eh?? Casi que me entró la nostalgia y hago la gran borracha de mandarle un mail al ex... en este caso a la ex amiga... Supongo que todo parece menos grave a las 4am, incluso sobria. No sé qué pasó. Nos llevábamos tan bien y de repente empezó a tener una actitud poco piola y yo perdí la paciencia...  en fin. Tengo un thread y medio... pero qué medio!! Son PAGINAS Y PAGINAS de mail... y la verdad no sé si lo quiero postear...))

((Colgamos tanto con este tema que la última vez que lo tocamos fue exactamente hace un año... o al menos lo va a ser la semana que viene XD qué tul, ¿eh?))

Jenna miró a Matt con una mezcla de horror, mortificación y vergüenza. ¿CÓMO podía no haber atado cabos y deducir que si Matt que había salido con Jewel no quería entrar a una librería... debía ser porque se trataba de la que ella sabía que Jay había heredado. Era un simple tema de 2+2 y no se le había prendido la lamparita. Ahora Matt iba a pensar que ella era una idiota... o que lo estaba usando para intentar poner incómoda a Jewel o para torturarlo a él. Después de todo, cualquier persona con dos dedos de frente hubiera hecho la conexión instantáneamente. Y por la manera impulsiva en que ella había dicho que entraran ahí, bien podía dar la impresión de que quería o hacerle pasar un mal rato a su ex amiga, o ver qué reacciones tenía Matt frente a ella... cuando había quedado en claro la última juntada con Tess que él aún estaba mal por el tema Jewel... sea lo que fuere que hubiera pasado entre ellos dos años antes. Ya le preguntaría a Tessa al respecto. 

"I'm sorry." Le susurro en cuanto Jewel se alejó a buscar los libros. "I had no idea she worked here. I swear!" Insistió con vehemencia, segura de que su incomodidad lo haría pensar aún más que ella lo había hecho a propósito.

Jewel puso cara de orto cuando él concordó con ella. Hubiera hecho lo mismo si disentía, por supuesto. "Está bien. Se estaba poniendo cargosa, así que Jens la llevó a pasear en escoba." Informó secamente, como para marcar territorio. 

Cuando regresó con los libros, los dejó encima del mostrador y le hizo un gesto a Jenna para que los revisara si quería. Ellas habían sido muy amigas y ahora eran... bueno, no enemigas, tampoco perfectas desconocidas, pero sí una cosa muy incómoda de sobrellevar, por lo que Jewel sentía. 

"La puedes pasar a buscar el fin de semana si quieres. Jens y yo tenemos una cena." Informó dándose aires.

Matt también puso cara de pocos amigos al escuchar la noticia. "Sabes que no me gusta que esté a solas con ese tipo." Le dijo apenas regresó con los libros, intentando sonar superior a ella y calmado aunque no lo estaba. "Es peligroso."

"¿Ah si? Cuando te conviene la puedo sacar el fin de semana porque tienes planes y cuando no tengo que limitarme a esperar a que se te antoje salir?" Preguntó ya menos calmo que antes. A otra persona le hubiera dado no sé qué el que Jenna estuviera presenciando eso, pero a él no le importaba. De todas formas ella vivía diciendo que pensaba mal de él y que nada podría cambiar su opinión así que...

Jenna se sintió más incómoda aún que antes. Era una conversación privada y acalorada de la que no podía escapar de manera alguna pero tampoco quería tener que oír. 

Asintió y se puso a ojear los libros sin interés como para intentar alejarse al menos mentalmente, de la pelea familiar. En ese momento no pensaba nada en particular sobre Matt. Estaba más interesada en ver cómo su antigua amiga se manejaba en esa situación. El motivo de la pelea había sido que Jenna había opinado que Jewel era demasiado buena para Matt, que sería mejor que lo dejara antes de que éste terminara usándola y dejándola como a todas las demás mujeres y como había hecho con ella misma en el pasado... pero Jewel no había querido escuchar. Se había enojado enormemente y gritado y dicho que Jenna estaba celosa entre otras cosas, de manera que ésta deicidió dejar de gastar su tiempo en alguien que no apreciaba su sincero consejo. Ella los sentía incompatibilísimos... y ahora estaba viendo la prueba de ello en vivo y en directo, como si el divorcio de ambos no hubiera sido suficiente. Se preguntó si Jewel era consciente de todo aquello y si sería en parte la causa de su irritación, a demás de verla entrar con su ex, el padre de su hija.  ((Tengo permiso de Jewel para escribir eso, o no, Jay? No es godmoding))

A ella no le molestaba que Matt tuviera hijos. No eran de ella. Ella adoraba los chicos y, para peor, era estéril, así que cuantos más, mejor. Sobre todo porque al no ser propios los podía disfrutar sin tener que fumarse las responsabilidades y eso le convenía.

((Obvio. Lo planeamos así desde el principio. Y así estaba en el otro foro. Creo que tengo los temas guardados en algún lado...))

"Mejor que te acostumbres, entonces, porque en pocos meses me voy a casar con él y va a pasar a ser parte de la vida de ella de manera permanente." Le espetó furiosa. Sus ojos lo fulminaban. "¿Qué dices? ¡Si es un Auror! ¡No podría estar más segura! A demás, si tu estás con Jenna, yo puedo estar con Jens." Insistió orgullosa, cruzando los brazos de manera de sobresaltar sus pechos para que él viera lo que se estaba perdiendo.

Ella sí era consciente de que Jenna estaba allí y la mortificaba enormemente el que tuviera que presenciar aquella escena que le daba la razón a lo que alguna vez le hubiera dicho, pero estaba tan tan tan frustrada y molesta que honestamente no le importó demasiado. Desquitarse de Matt era la prioridad de momento. 

"No te hubieras ido. Estamos divorciados. Así funciona, Matt."

Matt apretó los puños y la mandíbula. Aquello no le gustaba nada. "¿Ah sí? ¿¡Las familias de quienes son atacadas y brutalmente asesinadas primero en cuanto hay un problema!? ¡De los Auror! Y ahora todo el mundo la está viendo asociarse con él. ¡Lo único que me faltaba! ¡Si le sucede algo quiero que sepas que quedará sobre TU consciencia!" Le espetó. "And for the record, Jenna and I are just colleagues, but you HAVE to get all jealous and go and see things where there aren't, don't you!?"

"No me hubieras echado. Yo pasé por una experiencia traumática y tu me gritaste durante semanas en lugar de apoyarme. Y luego ese berrinche de tirarme la ropa por la ventana y pedirme el divorcio... ¿qué se supone que hiciera? ¿Que te llevara a París y volviera a proponerte matrimonio?" Ironizó furioso."

Las palabras de Matt la dejaron helada por un segundo. Su rostro reflejó horror antes de pasar a la furia nuevamente. "Pues estamos en época de paz y, de todos modos, él es mucho mejor Auror que tu, así que no le sucederá nada." Insistió más para escucharlo ella misma que por él. "Como si no te conociera. Eso es solo cuestión de tiempo." Insistió con terquedad. 

"Y DALE con la experiencia traumática. Por favor, no seas ridículo! Desde cuándo el sexo es traumático para ti, Matt?"

El rápido flash de miedo de Jewel no se le escapó, puesto que la había estado observando de cerca y a estas alturas la conocía bien. 

"No pienso arriesgar a mi hija solo porque tu piensas con la cabeza de abajo." Le dijo ahora lo más calmadamente posible al ver que ella se irritaba. Le gustaba sentir que estaba en control cuando ella gritaba para poder achacarlo a que ella era una loca y él estaba perfectamente tranquilo, al menos en la superficie. 

"Así estuviera con noventa mujeres, los que se abusan de las niñas pequeñas son los padrastros no las madrastras ni las novias. Si te casas con ese enfermo, ten por seguro que te quitaré la custodia." La amenazó con seriedad. 

"No voy a discutir esto ahora, pero sabes bien de lo que estoy hablando. Espero que nunca tengas que experimentarlo en carne propia porque ni tú eres lo suficientemente harpía como para merecerlo!"

Jewel abrió la boca inconscientemente, indignadísima de que Matt hubiera dicho algo tan desubicado sobre ella, por más que una parte de su mente le decía a veces que era cierto y la hacía auto cuestionarse sobre Jens. De todas maneras, la instintiva cachetada se la puso igual, y bien puesta at that. "¿Cómo te atreves...?" Murmuró. 

"Eso es totalmente sexista y Jens sería incapaz!" Dijo ella, aún indignada. "No creas que vas a asustarme con amenazas. Yo soy su madre y eso es algo que cualquier juez va a poner por encima de todo." 

No dijo nada ante lo último porque no se le ocurrió. Estaba demasiado furiosa aunque una pequeña parte de ella entendía que tal vez él tuviera razón, no estaba lista para enfrentar ese concepto como realidad, lo mismo que le costaba pensar que él tuviera otros hijos.

Matt la vio venir pero no la frenó. Sabía que ella no tenía suficiente fuerza como para hacerle daño realmente y, por otra parte, siempre la jugaba de víctima. Le convenía dejarla hacer. 

"Violencia doméstica, Jewel? En serio?" Le dijo exhibiendo una furia fría, calculada. "Si eres capaz de levantarme la mano a mi, un hombre grande al que no le haces ni cosquillas, me pregunto qué pensará el juez de saberte responsable de una niña pequeña con ese carácter que nunca puedes controlar..." Dijo totalmente bajo control. Más aparentemente calmo cuanto más loca se ponía ella. 

"Esto no se terminó acá." Le advirtió preparándose para marcharse, lo cual hizo a continuación sin detenerse a pensar que Jenna estaba ahí también. O tal vez lo había pensado y quería ver dónde estaban las lealtades de ella. Si se habían hecho suficientemente amigos como para que lo apoyara o la escena la había alterado o asustado lo suficiente como para decidir que sí lo odiaba después de todo. Era una prueba. Quería saber cuál sería el resultado... pero principalmente estaba furioso y se fue caminando rápidamente de la librería, bajando por la calle principal de Hogsmeade hacia el camino que llevaba a Hogwarts.

Se le heló la sangre en las venas cuando se dio cuenta de lo que acababa de suceder. Ya le había pegado varias veces, pero esta vez él tenía un testigo y ella había caído totalmente en su trampa, porque era lo suficientemente paranóica como para pensar que ellos dos lo habían planeado todo desde el principio para joderla. 

No pudo reaccionar por varios segundos, demasiado espantada ante la idea de que le había dado todas las herramientas para quitarle a su hija. Sintió pánico, terror, frío y la necesidad de rogarle, pero no iba a caer tan bajo. Era muy orgullosa y había "público". En todo caso, si él le quitaba a la niña ella quedaría como la víctima y él como la mala persona. Jewel también disfrutaba siendo la víctima y, a demás, dudaba que realmente un juez fuera a fallar a favor de él. 

Lo miró irse, aún demasiado azorada como para responder. Cuando Matt pasó ya fuera del alcance de la visión de su vidriera, se dejó caer en la banqueta detrás del mostrador y apoyó los brazos sobre el escritorio para esconder su cara. Se sentía avergonzada, derrotada y tan asustada que no pudo más y se largó a llorar. Era fácil intentar mantener la compostura porque estaba Jenna con Matt presente, pero sin él allí el show se había terminado. Tal vez con suerte consiguiera un poco de lástima de su antigua amiga, la suficiente como para que no testificara en su contra.


"Ni se te ocurra decirme te lo dije!" Le advirtió entre sollozos, con la cabeza escondida entre los brazos sobre el mostrador.

Incómoda como estaba, se había girado un poco con los libros para darles la espalda, pero miró por encima de su hombro al escuchar el sonido de una cachetada. Le costó creer lo que acababa de ver, pero era obvio que Matt jamás le pegaría a una mujer, mientras que Jewel era conocida por sus ataques de ira. Algo similar había escuchado de la primera mujer del rubio por lo que se preguntó si rubia furia asesina sería su tipo de mujer. 

Pasado el segundo de la tonta broma interna, se sintió muchísimo más incómoda después de eso. La violencia le provocaba desagrado y la actitud de Jewel había sido desubicada a pesar de que el comentario de él lo hubiera sido más. No justificaba el uso de violencia física y pudo entender totalmente la amenaza de él. No sentía que un bebé fuera a estar a salvo en manos de semejante mujer. Ella la había conocido de toda la vida y lo sabía mejor que nadie. No tenía nada de paciencia. Por otro lado, también podía empatizar, al menos mentalmente, con la lucha feroz de una madre por no perder a su hija... era una situación difícil y ella odiaba estar en el medio. 

Cuando fue evidente que Matt se mandaría a mudar se estremeció. No quería quedarse a solas con ninguno de los dos, pero si se marchaba por su cuenta cada uno asumiría que se había quedado con el otro. 

Sin embargo, cuando vio a Jewel romperse a llorar así, se ablandó un poco por los años compartidos y se acercó a ella con expresión compasiva, al menos hasta que le ladró esa frase. Ella quería ayudarla y la otra le ladraba antes siquiera de que pudiera decir ni pío. Se enojó muchísimo y se le veía en el rostro. "En realidad, pensaba decirte que lo siento, pero si vas a tomarte todo para la mierda antes de que siquiera diga pío, la verdad es que puedes irte a la mierda!" Le espetó ciega de ira Taurina. No es que estuviera de parte de Matt, es que Jewel la había maltratado a ella, específicamente, de manera gratuita y cuando tenía la mejor de las intenciones. 

Se fue del lugar con la frente alta y siguió el camino que Matt había tomado. Tuvo que correr un poco para alcanzarlo. "Disculpa que estuviera en medio... no debí llevarte ahí. No tenía idea..." Le aseguró mortificada.

Tuvo que hacer un esfuerzo para dejar de caminar a mil por hora cuando Jenna lo alcanzó. La verdad es que no tenía ganas de hablar con ella. Quería estar solo y poder pensar. Luego querría hablar con Tessa, seguramente. Pedirle consejo. 

"Está bien." Dijo tras un pesado suspiro. "No fue tu culpa. Debería haber sabido que no paseas mucho por el pueblo. La conversación se me fue de las manos." Explicó calmado, a la fuerza, porque no quería hacer OTRA escena, esta vez frente a Jenna y a TODO el pueblo, a la intemperie. "Es que la cagada es que Jens es un buen tipo. Después de lo que pasé con Steph, la idea de que cualquier mortífago pueda lastimar a mi hija porque él se encariñó con ella lo suficiente..." Volvió a suspirar y se pasó una mano por la cara. Detestó estar mostrándose vulnerable con Jenna, así más no fuera en forma de furia y no de tristeza. Le moletaba que ella lo viera en un momento que para él era privado, pero por otra parte, quería saber que la tenía de su lado. Sentía la necesidad de explicarse.

Notó que él estaba exaltado pero asumió que no se la agarraría con ella... o tendría que mandarlo a mudar a él también. Prefería ser amable con la gente, pero si tenía que ser firme y levantarles la voz, no iba a dejarse pisar.

Asintió agradecida de que él comprendiera que no había sido a propósito. "En verdad no quería causar tanto revuelo, Matt." Estaba a punto de decir algo sobre que no quería que por su culpa se le complicara la vida a su hija cuando él explicó lo de Jens. "Lo entiendo totalmente. Aunque estemos en tiempos de paz, uno nunca sabe cuándo pueden volver... y hay cosas con las que no se juega. La seguridad de la familia viene primero." Concordó. 

"No puedo creer que te pegara!" Añadió indignada después de una pausa. "Quiero decir, tu comentario fue totamente desubicado pero..." Buscó las palabras justas. "No lo justifica." Dijo finalmente, negando con la cabeza en incredulidad. "Pensé que ese tipo de reacciones se le habrían pasado con la edad."

Matt negó con la cabeza vehementemente para que ella entendiera que debía dejar de disculparse. No tenía mucha paciencia en ese momento y no quería agarrársela con quien no tenía la culpa. 

Internamente, se sintió bien que ella comprendiera su punto de vista y lo defendiera. Generalmente las mujeres se complotaban en su contra cuando había una discusión y no esperaba esa reacción justamente de ella que siempre había dicho que era una persona detestable. 

Se encogió de hombros. "No es la primera vez tampoco..." Añadió entre dientes, furioso, apartando la mirada de su colega porque no podía soportar mirarla a los ojos en ese momento. "Disculpa... no quiero ser grosero, pero quisiera estar solo." Le dijo sinceramente, después de respirar varias veces para calmarse, cuando finalmente pudo volver a verla a los ojos de manera más o menos sociable.

Se sorprendió levemente de saber que no era la primera vez, y luego se recriminó por sorprenderse cuando era casi esperable dado lo que conocía de su antigua amiga.

"Sí. Por supuesto. Lo comprendo totalmente." Le aseguró nerviosa. Nunca lo había visto así de alterado y le daba no sé qué dejarlo solo, si bien dudaba que fuera capaz de hacer alguna estupidez, de cualquier índole. 

"Cualquier cosa me envías una lechuza, ¿si? Estaré en casa." Le dijo a pesar de que sabía que era rebajarse como de mujercita que le anda atrás. Pero sentía que él necesitaba saber que contaba con el apoyo de alguien en ese momento, si bien tal vez estuviera equivocada en ese sentido. Es que el verlo perder la compostura por primera vez la hizo verlo humano. Y eso la llevó a empatizar.

Matt asintió. "Gracias." Dijo medio ausentemente. Tenía ya la mente en otro lado. No quería estar allí. Ya se calmaría luego lo suficiente como para poder apreciar el gesto y se lo agradecería, seguramente.

"Nos vemos luego." Se despidió antes de desaparecerse.

En la trastienda del negocio, Lorelei se despertó de la siesta con el escándalo que era su mamá llorando. Había tenido una pesadilla y, ella también, estaba llorando a los gritos para conseguir atención. No estaba teniendo un buen día.