Wendy venía de los terrenos, donde había estado paseando un rato. Había tenido un encuentro desagradable con Nicole, la hermana del futuro marido de su hermana, por lo que estaba furiosa y no miraba por donde iba.
Se llevó puesta a su amiga de lleno y se golpeó en la cabeza. Se quejó y se agarró la frente donde se había golpeado. —¿Por qué no miras... ¡Lily! —Reconoció a su amiga con sorpresa. —Lo siento. No vi por donde iba —confesó comenzando a calmarse un poco, aunque tampoco estaba de mucho mejor humor que Fisher.