Saliendo de la ducha

Era un jueves por la tarde y Nik había decidido ducharse después de un par de días en la enfermería por culpa de la infección esa que se había agarrado. Estaba de tan buen humor como alguien como ella podía tener. Se sentía mejor tras un período de sentirse para la merdre, no estaba más en reposo y finalmente era libre de volver a ir a donde quisiera y sobre todo, de poder bañarse y ponerse ropa decente. No podía pedirle más de momento a la vida estúpida y horrible que tenía.

Salió de la parte de las duchas envuelta en una salida de baño color lila y con el pelo cubierto por una toalla del mismo color. En lugar de vestirse, se concentró en soltarse el pelo y secarlo enérgicamente con la toalla, pensando en sus asuntos mientras lo hacía.

Maurie había ido al baño con la misma idea, aunque algo después que Nik. Sus días eran tan agitados últimamente, que incluso compartiendo el giratiempos con John no llegaba a hacer ni la mitad de todas las cosas que tenía que hacer... ni que hablar de las que quería hacer, como bañarse... que últimamente se había convertido en un lujo escaso que hacía a las apuradas.

Por ejemplo, ese día lo había hecho en tiempo récord y había acabado por salir de la ducha apenas un momento después que Nicole a pesar de haber llegado más tarde. No le hacía gracia el bañarse a las apuradas pero no tenía mucha más opción y a demás si pasaba mucho tiempo en remojo, las heridas de la espalda se le irritaban y como eran mágicas y no habían terminado de cerrar bien nunca, se le ponían feas y dolían.

Cubierta con un toallón amarillo, salió de la ducha en ojotas y se puso a secarse el pelo cerca de Nicole. Un momento después la reconoció y se animó de verla. No había hablado mucho más con ella después de aquella conversación, pero se sentía cercana a la chica por el secreto que compartían y por las cosas que habían hecho una por la otra, a pesar de que no fueran realmente amigas, per se.

"Hola." La saludó con una sonrisa medio tímida. Como sus problemas se habían solucionado bastante bien, Maurie ya no andaba tan desanimada como antes y a demás estaba alegre de verla en pie. "Es bueno volver a verte entre los vivos. ¿Cómo te sientes?" Le preguntó con preocupación poniéndose en el papel de madre como siempre.

Nik se sobresaltó bastante porque se había creído sola en el baño y del salto que pegó se le cayó la toalla al piso con un pequeño gritito de susto. Después se tentó de sí misma y se largó a reír mientras se doblaba a recoger la toalla del piso. "Hola." Le devolvió el saludo todavía medio tentada por su propia reacción a pesar de que no era de reírse mucho.

Sonrió de lado de manera orgullosa pero amigable cuando escuchó el comentario de Maurie y le sostuvo la mirada en agradecimiento por todo lo que había hecho por ella. "Bastante mejor ahora que pude ducharme." Dijo sinceramente. "Esas camas de hospital te hacen sentir toda pegajosa..." dijo con una mueca de desagrado. "¿Tu? ¿Cómo estás?" Le preguntó ahora más seriamente, porque sabía que el tema de ella exigía sobriedad.

Maurie también se tentó con la reacción de Nik y rió con ganas. Hacía mucho que no tenía demasiados motivos para reír y miles para preocuparse, así que le vino bien. Sintió que hacía mucho que estaba dormida, como caminando entre sueños y finalmente se le había despejado la cabeza, por así decirlo y se dio cuenta de lo muy amarga que había andado esos días. Casi que entendía por qué Lex le había dicho lo que le había dicho sobre ella y John y tomó nota mental de intentar reírse más. Ahora, que fuera a hacerlo o no, era otra cosa. "Lo siento. Fue muy gracioso." Se disculpó enseguida por reírse de ella. No debía ser de lo más educado.

Sonrió con complicidad, como quien entiende. Ella sabía muy bien a qué se refería. "Ay, sí. Un asco." Concordó con una mueca de... bueno de asco. "Oh..." dijo ante la pregunta de ella y ver cómo se había ensombrecido de repente. Por un momento sopesó sobre si decirle la verdad o no y finalmente se decidió por una opción media. Todavía no confiaba en las serpientecitas como para arriesgarse a perder su precioso secreto ahora que lo había recuperado-

El rostro se le iluminó de repente cuando dijo eso. "Bien... mucho mejor... ¡Tengo tanto que contarte!" Le dijo entusiasmada, como si fuera una amiga con la que hacía mucho que no se ponía al día. No pensaba decirle que estaba en el castillo, pero no veía por qué no compartir uno de los pocos motivos de alegría que tenía últimamente en su vida.

"Lo sé. No te preocupes." Le dijo todavía con un resabio de la risa anterior curvando sus labios.

Nik se mostró abiertamente sorprendida de verla tan animada de repente con ese tema que la había puesto tan mal antes y la miró inquisitivamente. Se preguntó qué podía haber pasado que fuera a poder cambiar algo tan definitivo como la muerte, pero cuando ella se ofreció a contarle, no pudo menos que alegrarse. Le había picado la curiosidad y, ahora que lo pensaba, Maureen era una chica con la que podía compartir la verdadera historia y lo que había pasado con el profesor Rogers, porque estaba en situación de entenderla. Sobre todo si la cosa había mejorado como para que contarle su experiencia no fuera equivalente a refregarle por la cara lo que ella tenía y la otra chica no.

"Podemos ir a la torre a hablar un rato si quieres. Tengo un montón de caramelos en la mochila. Mi abuela me los manda." Explicó animada, volviendo a secarse el pelo, con la intención de vestirse pronto para poder enterarse.

Se quedó más tranquila de saber que no la había ofendido. Como era Sly y ellos siempre eran bastante orgullosos, temía haber iniciado un problema. En especial siendo que ellas dos ya habían tenido discusiones con anterioridad.

Por un momento pensó en decirle que no, que tenía cosas que hacer e ir corriendo a ver a Nicky como hacía siempre, pero después se dio cuenta de que era una oportunidad de pasar tiempo haciendo cosas de su edad... aunque la charla fuera de mujer a mujer, pero al menos era una charla en una escuela y no una responsabilidad más. También pensó que necesitaba tanto el descanso como poder sacarse eso de adentro, así que asintió con una sonrisa en los labios. "Me parece genial. Deja que me vista." Pidió y ella también pasó a secarse el pelo y después ponerse la ropa que había traído. Una remera de una banda punk, un canguro negro con bolsillos al frente y cordón gris en la capucha (que se puso también) y abajo de eso unos jeans muggle bastante anchos y lonas negras. Aunque venía de una familia muy tradicional, siempre le había gustado vestirse así para llevar la contra.

"Lista." Le dijo con su mochila negra al hombro cuando terminó de cambiarse. "¿Vamos?" Le preguntó junto a la puerta antes de salir.

((Me ENCANTA la cara de culo que tiene la Stewart ahí. Captura bien el espíritu de Maurie en esta etapa de su vida mucho mejor que la minita que usaba Sha.))

Notó el momento de duda de Maureen, y estuvo a punto de decirle que no hacía falta, pero entonces ella volvió a hablar. Entonces Nik calló y sonrió. La idea de tener compañía la entusiasmaba. No tenía muchas amigas y sola tendía a deprimirse. "Yo tampoco puedo salir en bata." Bromeó con una sonrisa ladeada.

Ella se había puesto un sweater púrpura fuerte abotonado adelante y unos chupines negros elastizados con polainas y botas de cuero abajo. No era del todo buena capturando el espíritu muggle pero le gustaba la vestimenta que usaban, así que a menudo combinaba todo de cualquier manera.

Terminó de guardar las cosas en su propia mochila negra de una banda indie y la siguió afuera. Se mandó por el pasillo para la derecha pero sin apuro. "Todavía no te agradecí por llevarme a la enfermería." Le dijo cabizbaja, pero pretendiendo mirar las baldosas porque eran muy interesantes. "Gracias. Creo que muy probablemente me salvaste la vida." Le dijo con seriedad.

((¿Sí? A KStew no la soporto. Me gustaba más Thora Birch, pero la saqué al adoptarla para darle un toque personal... IYKWIM))

Rió otro poco por el chiste mientras se secaba el pelo. "Es cierto."

Levantó y bajó las cejas en un solo segundo. "Oh, no te hagas problema." Le sonrió con su amabilidad habitual. Era de las chicas más simpáticas que andaban por ahí. "Tu hubieras hecho lo mismo por mí." Le restó importancia.

Anduvo por el pasillo con ella de un humor demasiado bueno para lo que venía mostrando últimamente. Por un momento se había olvidado de sus problemas y era simplemente ella, caminando por los pasillos con una amiga. "¿Cómo te las arreglas con la sobreproducción de... ya sabes?" Preguntó en tono casual. Parecía animada. Era la primera vez que hablaba del tema con tanta liviandad, pero el estar hablando con alguien en igualdad de condiciones la hacía sentirse bastante más relajada, sin los nervios que el pensar en lo que la otra persona pensaría de ella le generaban y sin preocuparse por tener que explicar tecnicismos que hacían a sus amigas tomar un color rojo bastante molesto.

((Seh. Se entiende. Igual si en algún momento te pega la nostalgia... ;))

Ella también rió un poco más, de manera nasal y siguió cambiándose.

Hizo una especie de 'je' con la garganta y sonrió, porque era más o menos cierto. Al menos hubiera llamado a algún profesor para pedir ayuda.

Primero la miró una fracción de segundo confundida, pero después se notó que le cayó la ficha. "Oh, eso." Dijo con una sonrisa cómplice. "I pump several times a day and send it to the adoptive parents." Explicó mirándola con algo de miedo de que se pusiera mal por lo que estaba diciendo considerando la situación de Ashby. Eso la hizo volver a recordar lo que había dicho antes y preguntarse qué buena noticia podía tenerle.

"¿Tú?" Preguntó por hablar de algo mientras llegaban a donde iban.

((¿Le pego más fuerte para que aprenda?))

Le pareció que Nicole debía ser una chica bastante tímida, porque solía verla sola bastante seguido y tampoco hablaba mucho. No estaba segura de si era así por naturaleza o se había vuelto así por lo que le había pasado, de lo cual Maurie tampoco conocía los detalles o hubiera pensado algo totalmente distinto de ella. Antes de ese año casi ni la notaba, así que era poco lo que podía conjeturar observándola.

Maurlz arqueó las cejas impresionada. "¡Qué genial! Eso va a ayudar a que desarrolle mejor el cerebro. Los primeros tres años son muy importantes y la leche materna es lo mejor para eso." Comentó animada. Claramente había estado leyendo demasiados libros y artículos sobre el tema en un intento por encontrar algo que la ayudara a mejorar las probabilidades de supervivencia de Nicky.

"Hmm... algo parecido..." dijo de manera evasiva. Entonces se le ocurrió que eso podía darle la idea equivocada. "Ya te contaré cuando lleguemos a la torre." Explicó.

"No sabía que era una adopción abierta." Dijo impresionada. "Así al menos podés conocer a tu bebé y verlo crecer." Dijo desde su posición al menos. A ella le parecía una buena idea.

((XDDDDDDD es otra opción))

La miró con una cara de aprensión que estaba bastante más cerca del desagrado que de otra cosa. Para ella, era una tortura innecesaria, algo a lo que la habían obligado como parte del pacto para deshacerse de la evidencia. Lo que se hiciera del chico o de su cerebro en desarrollo, cuanto menos supiera, mejor. Había sido su hermano quien había insistido en que fuera una adopción abierta y toda la estupidez, diciendo que de lo contrario algún día se arrepentiría y toda esa sarta de idioteces. Apretó los labios con fuerza, con cara de traste, para evitar que todo el veneno que tenía adentro se le escapara en una lluvia de quejas e insultos, porque no tenía suficiente confianza con Maureen como para hablar mucho con ella. Menos que todo de temas importantes. De lo contrario, la hubiera tenido que escuchar diciéndole todo lo que realmente pensaba sobre esas estupideces maternales de desarrollo, de pumpear, de los niños en general y la mar en coche.

"Uh, Ok." Dijo simplemente, con tono de mala onda y expresión sombría. Ya no tenía ganas de ir a ningún lado con ella, que la había puesto de mal humor, pero tampoco quería decirlo. Era el camino del escorpión, esperar con cara de cul a que el otro le leyera la mente y enojarse porque no pasaba.

Cuando Maurie ignoró sus dos primeras advertencias de que le hinchaba las que no tenía con mariconerías de madre adulta y responsable que ama a sus mocosos, Nik ya venía acumulando suficiente ira adentro y le respondió porque no pudo aguantarse más, agradecimiento o no agradecimiento, poca confianza o modales, todo al carajo. "Seh, es lo que dijo mi hermano. Sinceramente, no podría importarme menos." Le espetó irritada. A ver si con eso entendía que no tenía que decirle las mismas mierdas que su hermano y el resto de esos idiotas.

((Me hace acordar a mi cuñada Nicole...))

Maw notó el cambio de actitud en Nicole y se preguntó si habría sido una buena idea después de todo el ir a hablar con ella, pero en vista de que había sido ella la que había propuesto ir a la torre y que ahora que Nicky estaba vivo, se sentía demasiado afortunada, no quiso decir nada y se tragó la bronca de ser maltratada porque sí. Se preguntó si no sería timidez, o si realmente la idea del breastfeeding o el hablar de ello le molestaba tanto.

Lo siquiente que le respondió su compañera la hizo pensar que tal vez no era una cuestión de timidez y se detestó por no saber decir que no y no saber mantenerse al margen de la gente que no conocía, aquella que todavía podía lastimarla. No era como si le sobrara tiempo como para estarlo desperdiciando en pendejas malcriadas y malhumoradas que no sabían apreciar lo que intentaba hacer por ellas. Pero era demasiado tarde para marcharse ahora.

"Bueno, no hace falta que te enojes..." Le dijo en voz baja y tono conciliador. "Nada más era un comentario..." Todavía estaba cabizbaja y con las manos en los bolsillos de su hoodie.

((LOL eso no habla muy bien de tu cuñada XD))

Nik era consciente de que toda la idea había sido suya y se arrepentía tan amargamente de su estúpida decisión como Maureen. ¿Cómo se le había ocurrido pensar que se podía llegar a entender con un apestoso Hufflepuff?

Sin embargo, y en vista de que estaban yendo hacia la torre de todas formas, se tomó el tiempo para respirar profundamente y contar hasta diez antes de intentar explicarle de la mejor manera posible la situación. Eso quería decir que la iba a maltratar otro poco.

"Mira, evidentemente, tu eres del tipo maternal. Hay gente que nace así y gente que no. Yo no. No quiero saber nada con niños ni ajenos ni propios y sólo estoy haciendo esto del pumping porque por alguna razón para mi hermano es importante, y ya me tiene las bolas tan llenas discutir con él que prefiero darle el gusto. Ok??" Le espetó de bastante mal modo, girando el rostro hacia ella y mirándola con un brillo de ferocidad en los ojos. Era obvio que tenía ira, furia, que había sufrido, pero daba bastante miedo. "Pero al menos saqué un buen par de tetas del asunto y el exprimirlas por lo menos hace que dejen de doler." Continuó esta vez con un aire menos enojado y más de autocomplacencia.

((Era la idea...))


Dejó de caminar y la miró incrédula. ¿Cómo podía ser tan descorazonada? Se había equivocado enormemente al pensar que tenían cosas en común sólo porque habían tenido el mismo tipo de accidente. Pero también estaba ese gesto que había tenido con ella en el campo de quidditch... y no sabía qué pensar de ella, pero de momento, como no estaba pensando objetivamente, estaba indignadísima.

—¿Entonces de qué quieres hablar conmigo? —le preguntó de mal modo. Sentía que iba a llorar y no quería hacerlo. Apretó los puños. —Era una malagradecida y una desconsiderada. Tienes las oportunidades que otros quisiéramos tener y lo único que te importa es tener "un buen par de tetas". No eres más que una niña malcriada y engreída que sólo piensa en ella misma. ¡Gente como tú no debería tener hijos! —Le dijo sintiendo que las lágrimas le rodaban calientes por las mejillas.

Salió corriendo.